viernes, 30 de septiembre de 2011

Alcorcón. Yo acuso. 3. Contra la venganza

En 2 post escribí contra la violencia, las respuestas que me dirigieron algunos fue decir que por qué me quejaba ahora y no antes. Mi contrarespuesta fue clara, desde que comenzó ‘En mi barrio. Alcorcón’ no he insultado a nadie, mis críticas nunca pretendieron crispar y creo que siendo fuertes, no dañaban en lo personal. Sin duda la queja residía en el hecho de que bajo su apreciación, los socialistas en la anterior legislatura fueron violentos contra los populares. Y ahí, yo no me pronunciaba, según ellos. Pero hechos son amores, demostré que se puede criticar sin tocar aspectos personales.

Estos comentarios, que son educados, ojo, translucen una rabia contenida, con derecho a volcarla ahora. No digamos otras opiniones, cargadas de insultos e invectivas que he leído en otros lugares, incluyendo el blog del Sr. David Pérez, a la sazón Alcalde de este pueblo, que emiten odio acumulado y traslucen el derecho a la venganza. Una vuelta por blogs alcorconeros sobre acontecimientos de los últimos días me lleva a leer y visionar vídeos, que son muestra de las emociones de muchos. En ellos encuentro un argumento que se repite con una u otra formulación literaria entre las filas azules ‘socialistas a tomar de vuestro ricino’. La idea que dan los comentarios contra los socialistas y a favor de David Pérez, es que se están vengando de lo que antes hacía el PSOE.

Miren ustedes, juguemos un poco con las ideas, lo que realmente están diciendo es que esa forma de actuar estaba muy mal y quienes la practicaban eran unos cabrones. Si la gente reconoce que no se debe actuar así y ahora son ellos quienes lo hacen, están aceptando que ellos son ahora los cabrones. Antes eran sus cabrones y ahora son los nuestros, qué más da que se lo llamen a sí mismos. ¡Que se jodan! Dicen con unas u otras palabras. Es la venganza.

Lo que demuestran los comentarios es que hay odio y sed de venganza en mucha gente. Lo que yo escribía en el comentario anterior de Contra la violencia, es que hay quienes se están aprovechando de ustedes, la crispación puede ser amateur o profesional, y puede estar orquestada. La deriva anterior de la campaña electoral, parecía encontrar su justificación en el cambio de poder municipal, una vez conseguido el objetivo uno esperaría que no siguieran sembrando odio entre la ciudadanía. Pero no, continua la operación derribo, explicable solo por la sed de venganza.

En la campaña electoral hubo insultos por todas partes y que yo sepa, algunos más hacia el PSOE que hacia el PP, quizás porque los recibía de la extrema derecha y de la izquierda, además de sus contrincantes electorales. Ahora bien, he estudiado la crispación de la anterior legislatura y puedo decir que está abrumadoramente generada en la zona azul y contra los socialistas.

Podemos utilizar para hacer comprobaciones, la blogosfera alcorconera, la prensa nacional, la prensa gratuita, radios, televisiones, Comunidad de Madrid, etc. y las experiencias personales, difíciles de documentar porque no quedan pruebas, en la generada en las calles, bares, mercados, kioscos, centros cívicos y de mayores, esperas sanitarias... Yo aceptaré que estoy equivocado si me aportan prensa local, blogosfera local, televisiones, etc. que contenga mayor crispación socialista contra los populares.

Por un momento les pido que se olviden de todo y piensen en nosotros, usted y yo. Puedo apostarle doble contra sencillo que jugando a mostrar comportamientos corruptos, bajezas, violencia, etc. ninguno de ustedes terminaría por encima sin que yo les pusiera otro caso de su equipo. La pregunta inmediata sería, ¿y ahora qué? Nos vengamos mutuamente. La razón parece que obnubila a muchos que piensan que pueden machacar al otro y que éste se estará quieto mientras tanto. ¡Qué ilusos! Todos responderemos, todos responderán. La derrota total, aplastar al otro costará demasiado. Y les juro que humillar al otro no sale gratis, insultarle tampoco, acumula odio y ganas de devolver el golpe. Aumenta los deseos de venganza.

El problema de la venganza es que será un sumando más que aumentará la crispación social en estado de avance no solo por la relación política azul y roja, el problema de la venganza es que incorpora un nuevo jugador a un terreno de juego peligroso, en el cual se vislumbran chispazos de violencia inusuales; en ese joven que se le va la olla y te amenaza, en el taxista que sale del coche con la barra para golpearte, en la furgoneta de reparto que te agrede, en el ciclista que te responde amenazándote, broncas en las esperas, excitación de las bandas juveniles, botellones encrespados, peleas callejeras, robos, cabreos contenidos, situación económica crítica que seguirá, futuro incierto, y escaparates plenos de artículos llamando la atención. Hay muchas cuestiones susceptibles de crispar para tener cuidado de no agregar una más.

Recuerden que un cazurro realizando una acción indefendible es reprobable, pero menos peligroso que la siembra de ideas guerra civilistas, por instituciones, poderes o medios de prensa. Un individuo aislado realizando un acto inaceptable, es simplemente eso, un individuo, un órgano colectivo diciendo o realizando un acto inaceptable, es un difusor de basura a la ciudadanía. Cada uno a su lado, a su vecino, tiene la oportunidad de frenar algo.

Escribe Manuel Vicent el día 25 ‘’Escaparates’’
La desesperación que produce esta crisis económica, a la que nadie ve salida, está liberando en la atmósfera una electricidad estática. Basta cualquier chispazo, un triunfo deportivo, una carga desmedida de la policía o el simple tedio mortal, para que se desencadene una tempestad.

Puesto que nadie piensa ya en aquel sueño de la revolución que iba a cambiar el mundo, la cólera popular va dirigida a arrojar una piedra, a excitarse con el estallido de los vidrios, a saquear las tiendas y lanzar después en su interior una tea incendiaria para que ese fuego ilumine el futuro de una sola noche y ardan juntos el lujo y sus excrementos. Los desesperados se sienten redimidos por la violencia callejera y se creen héroes al traspasar el horizonte de unos sueños al alcance de la mano en los escaparates. El fin de la historia consiste en asaltar grandes almacenes como si fueran el Palacio de Invierno

No hay comentarios:

Publicar un comentario