martes, 30 de agosto de 2011

Campaña de agitación y propaganda. Limpieza 2

Campaña sobre la campaña de limpieza. Capítulo dentro de la batalla de la comunicación, en este caso aplicada en nuestro pueblo.

Ustedes se imaginan que en un bloque de vecinos una ventana tuviera una pancarta diciendo ‘voy a limpiar la cocina’. Todos pensarían que es una pasada, y habría muchas risas. A cuento de qué esos vecinos quieren decirnos que van a hacer lo que todos hacemos habitualmente, pues vaya.

Miren ustedes, algo parecido está haciendo el equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Alcorcón. Está gastando dinero en una campaña publicitaria, de la que yo he visto al menos carteles multicolores y anuncios en prensa, que supongo costarán una pasta, y si habíamos quedado en que no tenemos dinero, no parece un destino prioritario el gastarlo en decir lo que vamos a hacer, se hace y punto, limpieza y seguridad nos gustan a todos pues adelante con menos gastos en publicitarlo.

Ocurre que con esto se muestra una forma de hacer política, a través de la agitación y propaganda se hace una campaña para decir que hacemos una campaña. Amplifican la intencionalidad y acercan a sus electores la idea de que todo ha comenzado, están en marcha la seguridad y limpieza. Difunden intencionalidad pero no resultados, porque supongo que coincidirán conmigo en que habrá que verlos a un plazo determinado, quizás a mitad de legislatura, o a su final.

Respecto a la limpieza, a todos nos encantaría y a mí el primero, menor suciedad, pero está por verlo. Al poco de comenzar su campaña, publiqué fotos, hace un mes, las isletas y alrededores se ven repletas y lo he seguido viendo, papeleras a rebosar, setos en cuyos bajos hay montones de bolsas, botellas y vasos, rincones con restos de muebles de pisos, malos olores… No podía ser de otra manera, somos la misma gente viviendo en el pueblo y los mismos recursos de limpieza, así que parece que el Ayuntamiento quiera decir que antes los trabajadores de limpieza no limpiaban y ahora sí. (Cabe que los hayan aumentado, por ejemplo en 10 trabajadores, que entre 170.000 habitantes, tocamos a un barrendero más para cada 17.000 ‘alcorconeros’, bien por la campaña)

Y por descontado cucarachas a manadas y otros habitantes de nuestras zonas sucias y aledaños de bares y restaurantes. Como no puede ser de otra manera, en verano más. ¿Recuerdan ustedes aquel artículo de los gusanos en las isletas, de Pedro Moreno, con la aplicación inmediata al socialismo? Bueno pues hoy sucede algo parecido, solo que yo no culpo a los populares, son cosas de este país nuestro en cuyos pueblos y ciudades hay una extrema dedicación a la hostelería y turismo y además tenemos un clima cálido que favorecen y potencian la existencia de millones de bichitos que nos acompañan. Si ustedes creen que por un cartel de colores habrá menos, se equivocan.

Las causas de suciedad y salubridad habrá que tratarlas a fondo más allá de limpiar unas pintadas y recoger periódicamente la basura, porque los niños y jóvenes siguen tirando las cosas al suelo, porque alguna viejita sigue tirando basura a la papelera, porque se dejan bolsas sin meter en las isletas, porque hay mucha tienda que deja desperdicios en la calle, porque los bares y su clientela ensucian demasiado, porque todo se inunda de publicidad y manchan paredes y papeleras, casas y buzones y teléfonos, porque siguen los botellones en todas las ciudades, porque el espacio público, el de todos no se cuida como cada casa…

Uso muchas zonas de juegos infantiles con mi nieta y puedo dar fe de que hay muchas pintadas, pero desde que vi los carteles a comienzos de verano y estando a finales, las sigo viendo pintarrajeadas y algunas con elementos dañados.

La pregunta es, ¿si estamos arruinados no es mejor gastar dinero en hacer cosas, que podamos ver los vecinos, y no en campañas de agitación y publicidad? Si la respuesta parece evidente, por qué entonces usar esa campaña como parte prioritaria de la política municipal,hasta convertirlo en lo más visible, junto con el goteo de vez en cuando de los desastres socialistas. Para amplificar en el ideal colectivo en la intencionalidad y así tratar de diferenciarse de quien limpia pero no lo dice. Todas las vecinas de ese bloque del cartel limpian diariamente.


A y desde Alcorcón, 202


domingo, 28 de agosto de 2011

Pronto comenzará un nuevo curso

Aquí en Alcorcón, lo hacemos con fiestas, igual que en muchos otros pueblos de España. Marcan el final de una etapa veraniega y el comienzo de la nueva temporada (antiguas cosechas, vendimias…). Muchos y grandes acontecimientos se están fraguando desde hace tiempo y podrían apabullarnos en el próximo presente, los rasgos generales los encontrará en mi otro blog ‘Arian seis’.

Además, los particulares de nuestro pueblo, en el fondo son parecidos a los de antaño, alguno con formas nuevas, pero el fondo, la esencia, ‘la chicha’, es muy parecido. Nos afectarán los problemas mundiales, los europeos, los nacionales y los comunitarios, aparecerán mezclados con su formulación global y nuestros problemas específicos, formando un cóctel con diferentes dosis.

En el municipio tendremos problemas con la limpieza, o la seguridad, los transportes y el aparcamiento, la contaminación, la crisis económica la falta de créditos y el paro, la fiscalidad, la educación y la ética en los comportamientos vecinales, el escaso debate argumental sobre los problemas políticos municipales, el poco interés político de mucha gente manifestado por la vida cotidiana y el exceso de clichés sobre principios, y supuestamente grandes asuntos, la falta de racionalidad en los análisis, la escasez de argumentos y el sobrante de insultos y descalificaciones, la utilización de la comunicación política, (agitación y propaganda) y el uso masivo del embudo o las gafas de madera en comportamientos políticos…

Son cuestiones que cada temporada están presentes, quizás en ocasiones con otros ejemplos formales, y no siempre, como pueden comprobar en mi libro ‘‘EN MI BARRIO. ALCORCÓN. Paseos a trompicones por las dificultades de 2009 y 2010’’, de venta en librerías alcorconeras.

Así la vida gira y gira sobre los sentimientos y emociones humanas siempre parecidas durante siglos.

Me permitirán ustedes que vaya volcando, poco a poco, opiniones sobre algunos asuntos que se quedaron en el tintero, por ejemplo sobre fiscalidad, viejo, nuevo tema y sobre comportamientos actuales que afectarán a la vida ciudadana.

A y desde Alcorcón, 205


viernes, 26 de agosto de 2011

El timo del pintor español

Antes de las vacaciones he sufrido el timo del pintor español. Comienza al querer pintar, por ejemplo, los techos y salón de tu casa.
Recoges muchos teléfonos de anuncios callejeros, y de los que te pasan el portero, los conocidos, las tiendas del barrio y ante el lio haces una pequeña selección.

Pides presupuesto y al final te decides por uno que es español, supones que te dará un cierto plus de garantía. Que error, que inmenso error.
Pintor español, que trabaja para una compañía de seguros, y además complementa con chapuzas y obras sumergidas junto con hijo español y ayudante español. Los 3, insistentemente repiten en casa que son oficiales de primera. Lo cual empieza a mosquearme antes de ver el resultado.

Comienza el desastre. Tapan ligeramente la vivienda, en la que vivimos por supuesto, por lo cual aparatos de música, cds, teclados, libros, y multitud de enseres y ropas, sábanas, cojines, sillones… aparecen con gotitas de pintura de los techos. Incluido paredes pintadas de habitaciones a las que no se pretendía pintar, porque las tiras de plástico para tapar fueron puestas cortas. (En sentido anchura)
‘Nada, nada, luego con un trapito húmedo’. Mentira, en las paredes quedaron las manchas y restregones. Habrá que pintar la habitación. Los enseres, paciencia en la limpieza.

Los techos. HORRIBLES, brochazos por todas partes perfectamente visibles, que cuando secaran no se notarían. CHAPUCEROS. Se notan los brochazos de recorte de bordes y los diferentes pasos del rodillo por unos lados y no por otros en los que resalta el tono más oscuro del trozo no pintado.

La pintura del salón, se quedó corta, no cubría, y cuanta más agua se añadía para extenderla menor cubrición tenía. Por detrás de los radiadores no se pinta, para qué, si se ve que se fastidien y encima pretenden justificarlo con que la anterior se pintó sin ellos, qué jeta tienen. Pero no se preocupen tampoco sobró nada (nada) de pintura. Hombre a la hora de pagar, ‘como hemos dado 2 manos tiene que pagar más dinero, porque el presupuesto fue para una sola mano’. Sin discusión, como un tonto pagué lo que me pidieron.

Al otro día y siguientes, daban ganas de vomitar ante el desastre. ‘Es que los techos estaban muy mal’, hombre si estuvieran perfectos no les hubiera llamado, ‘cuando seque no se notará’, se nota y mucho. Tanto se nota, tan mal estaban que he llamado a otros pintores para que repinten la casa. He tenido que recurrir a Valentín, joven empresario rumano que conozco desde hace 7 años, super formal, que me ha hecho varias obras de rehabilitación, super serio, el cual me remite a sus pintores que han repintado el piso, después de volverlo a recubrir totalmente.

PD. Soy hijo de pintor y he pintado bastante, por descontado mejor que estos inmensos chapuzas.

LES DEJO UNA TARJETA DE LOS TIMADORES PARA QUE HUYAN DE ELLOS


miércoles, 24 de agosto de 2011

martes, 23 de agosto de 2011

Las bicicletas son para…, la ciudad

Los viajes, aunque haya pasado el tiempo, dan para mucho, se aprenden cosas y se disfruta de comidas, bebidas, gentes, y culturas parecidas, las europeas, pero algo diferentes a nosotros, con sus particularidades.

En muchas ciudades del centro de Europa, donde llueve muchísimo más que aquí, por consiguiente peligro y barro superiores, nos llama la atención ver a señoras mayores elegantemente vestidas, montando en bicis con su compra en la cesta. O señores trajeados yendo a sus bancos, o jóvenes deportivos transitando de unos lugares a otros, o gente madura con sus hijos en sillitas, o viejos, transportando gatos en sus bicis…

Miles de bicis pueblan las ciudades europeas transitando por sus zonas peatonales, por sus carriles bicis y por sus calles, cientos de aparcamientos posibles para ese medio de transporte. Llama poderosamente la atención ver a las puertas de estaciones ferroviarias como Ferrara o Parma, bosques de miles de bicicletas. Sorprenden las ciudades y zonas universitarias plagadas de miles de bicis y motos que pueblan las ciudades italianas.

Aquí no vemos ni motos ni bicis en las universidades, vemos coches. En el país de Europa con mayor sol, clima más templado, menor lluvia y nieve y menor frio, nuestros jóvenes no utilizan masivamente motos ni bicis para ir a estudiar. Pues mucho menos para ir a trabajar la gente madura y bastante alejada la visión de mayores yendo a la compra, recados o trabajos. Aquí nos educamos en la contaminación que genera pérdidas de salud y enfermedades múltiples y practicamos el derroche energético petrolífero, porque vamos sobrados de todo.

En Alcorcón, tenemos bastantes carriles bicis por los que apostó el anterior equipo de gobierno y además tenemos universidad y parques. Falta como en otras partes, su implantación social, son necesarios empujones pedagógicos para convencer a la ciudadanía de que la bicicleta es un medio de transporte sano, barato, efectivo, y nada contaminante, que prácticamente no es utilizado en Alcorcón, ni en España. Lo nuestro es consumir gasolina, faltaría más y para ello exigimos un aparcamiento para nuestro coche a la puerta de casa.

Elementos contrarios a la apuesta siguen existiendo, ‘menudos somos nosotros en contra de todo lo que hagan ellos’, aunque lo fundamental es que sean simplemente contradictorios porque la disparidad y diversidad de intereses genera conflicto que habrá que resolver y compatibilizar. Incluso habrá gentes que todo lo cifran en pedir a los poderes públicos su implantación, aparcamientos, alquileres, etc. o los que critican cuando se hacen unos carriles bicis, porque restan espacio para aparcar, o los que critican los carriles bicis, simplemente porque ya hay calles, etc.

Por supuesto que el uso de otros medios de transporte generará conflictos, como todo en esta sociedad moderna tan compleja, en este caso no podemos olvidar lo fundamental, que en el espacio público debe existir lugar para la diversidad y ser compatible para fines de convivencia de niños, bicis, coches, ancianos, jóvenes, animales…

PD. posterior, ''Campaña con bici al cole''

lunes, 22 de agosto de 2011

domingo, 14 de agosto de 2011

Una cerveza. Y, ¿qué tal todo?

Terraza alcorconera, cerveza y unos calamares. Y esa pregunta que te hacen para que respondas con el consabido, ‘pues muy bien’. Pues si quieren solo esa respuesta que no hagan la pregunta. Hay otras fórmulas de cortesía para despedir a los clientes sin poner en aprietos, porque si preguntan, algunos podemos responder.

Pues miren ustedes, a mi la cerveza me gusta en baso cervecero o copa grande, pero con bordes finos de cristal. No me gustan esas jarras que al llevarlas a la boca dan trazos gruesos y ásperos, tampoco me gustan que las jarras goteen, porque han estado sometidas a congelación y van soltando el hielo derretido poco a poco y manchando poco a poco.

Ya sé que esta cerveza española más refrescante no es como la centroeuropea, mas de copas, tirada lentamente y en varios tirajes, que la primera vez que la pides crees que no te han entendido, pero que cuando la traen, te das cuenta de que es una copa con un sabor diferente y no es un refresco.

Pero sigamos con el ¿qué tal? No me gusta el pan malo, tan abundante hoy por tantas panaderías, pero más imperdonable en un restaurante o un bar. No cuesta tanto conocer un buen proveedor y elegir el mejor pan, no cualquiera de los múltiples malos que acostumbran a tener en las terrazas.

Las patatas fritas me encantan, y suelo conocer los comercios que las venden mejores, las embasadas de marca no cuentan por su precio, pero es que de las patatas fritas a granel que rodean mi barrio las hay buenas y malas, y un bar debería saberlo, tampoco suben mucho el precio unas buenas patatas y un buen pan.

Que ¿Qué tal?, no me gustan las terrazas con olor a tabaco, así que si fuman hay que retirar ceniceros constantemente, si hay coches que tiran ceniceros a sus bajos y/o papeleras, la terraza debe preocuparse de barrerlo.

Tampoco me gustan las terrazas ni bares repletos de papelitos que llaman servilletas volando por todas partes. No es tan caro un tiesto colgado en la mesa, o sobre ella, para depositarlas y evitar suciedad. Como tampoco encarece mucho una servilleta de papel algo más densa y grande que esos papelitos que llaman servilletas de los que tienes que coger 20 para sacar su utilidad.

Hombre y ya puestos a pedir, los calamares bien fritos, sin llegar a endurecerlos pero frititos. El pescado bien frito por favor.

A y desde Alcorcón, 203


lunes, 8 de agosto de 2011

Igualdad de trato ante la vida y la muerte

‘Y a mi abuela también la ‘afusilaron’ allí, en la pared de la iglesia’, gritaba violentamente un individuo a otro.
Terrible, la guerra civil sigue latente, pero no se trata de discutir sobre la guerra, sino de preguntar a ese individuo

¿Y tu abuela donde está enterrada?, ¿donde tú quieres?

¿Pues eso quiero yo con mi abuela?


En una guerra hay salvajadas, en la trastienda de una guerra mucho más. No se trata ahora de ver quien las cometió mayores y en mayor número de personas.
La discusión versa sobre donde enterrar a los muertos, si unos ciudadanos los pueden enterrar donde quieren y otros no pueden, no existe igualdad ante la ley.

La discusión es sobre por qué unos pueden enterrarlos en un sitio y otros no, la discusión es sobre un principio universal de igualdad ante la ley, ante la vida y ante la muerte.

Si las autoridades municipales actuales se meten por medio favoreciendo a unos sobre los otros, desviando libertades y derechos para unos sin garantizarlos para todos, están despreciando su mayor obligación, la de garantizar la convivencia ciudadana. Las heridas pueden estar abiertas, las autoridades municipales tienen la obligación de contribuir a cerrarlas no pueden tomar partido por unos u otros.


La Guardia Civil establece un dispositivo especial en Poyales del Hoyo

El alcalde reabre la herida. AITOR RIVEIRO 07/08/2011


A y desde Alcorcón, 200


jueves, 4 de agosto de 2011

Mal presagio el comienzo del Sr. Alcalde. En su blog

Siempre es preciso conceder un tiempo y el beneficio de la duda a las personas que ocupan un cargo nuevo, así pensaba hacerlo, pero las posturas del Sr. Pérez me empujan brutalmente fuera de cualquier titubeo y empiezan a suministrar señales, en una dirección peligrosa.
El 27 escribí el post Agitación extrema...)y el el 6 de julio 'vaya lios, ABC...'
Entre medias la campaña de 'los gratuitos' sobre la campaña de limpieza, aquí tambien reseñada incluidas fotografias de hace 2 años, y entrevistas en las que no se corta un pelo, y otras lindezas dignas de comentarios futuros después del calor...

No, yo no era votante del PP, pero hombre, respetaba y respeto a las personas y a las instituciones elegidas por el pueblo, hasta que ellos rechacen ese respeto o se produzca alguna sucesión de acontecimientos que me traten de expulsar de la sociedad.
Me paseo por el Blog de David Pérez y encuentro actitudes de alta crispación que no me gustan, tanto de los comentaristas, como del interesado, sea él mismo quien escriba o no, al aceptar que lo hagan con su firma lo refrenda. ¡Y eso habiendo ganado por amplia mayoría en las elecciones!

Los comentarios de sus extremados admiradores empujan a quienes no son como ellos y destilan barbaridades y excesos de ‘mala baba’, violencia y odio hacia la gente del PSOE, sus convecinos, comentarios que podrían ser en positivo hacia la gestión del PP, pero no, lo son en negativo hacia los otros, es una forma de ser y actuar que no suele presagiar nada bueno.

Expresiones despectivas e insultantes hacia el Ensanche Sur (gueto, soviet, cutre), parecen estúpidas, tanto como podrían ser las despectivas hacia el Metrosur, (si las hubiera, cosa que nunca escuché). El Ensanche Sur es un gran barrio, una de las señas de identidad de este y futuro Alcorcón, una buena acumulación de vivienda pública y ordenación urbanística con calidades, sentido común, buenos precios y comunicaciones y servicios mejorables, como todo en esta vida, pero desde luego de comparable o superior categoría a las del resto de los pueblos de la Comunidad de Madrid. (O quizás sea imposible de comparar porque no existan).

Alguno de los comentaristas decía que ‘son muchos los que no se alegrarán de lo bueno que se haga’, por supuesto con gafas especiales se refería a ‘los malos, la gente de izquierdas’, pero convendrán conmigo que si nadie lo aclara, la expresión literal podría ser aplicada a ellos mismos, a su inmediato pasado y presente.

A y desde Alcorcón, 201