domingo, 9 de agosto de 2009

A la calle por incompetente y marrullera. Despedida.

Vaya por delante mi estima a las personas que votan al PP. Discrepo de muchas de sus ideas, pero estoy dispuesto a cambiar de pensamiento si alguien me da argumentos que sean mas razonables que los míos. Por la consideración que nos debemos entre todos, y siempre que lo hayamos elegido libremente, sin imposiciones armadas ni violentas, aceptamos respetar a España y sus Instituciones y el Gobierno es una de ellas, que merece el máximo respeto de todos. ¿Que diremos a los niños cuando insulten a los maestros?, que ¿si no son de los nuestros no merecen respeto? Eso es lo que está diciendo Cospedal. Que la policía investigue a cualquiera, menos a los nuestros. Dice que son los otros los que cometen delitos.

El respeto a las personas y a su trabajo me parece importante. A la gente que falla en el desempeño de su labor, que se equivoca gravemente, que con sus actos puede provocar daños importantes en la empresa para la que trabaja, se le despide. Por consideración a la labor bien hecha del resto de trabajadores. Por eso deben despedir a Cospedal.

¡A la calle! porque ha demostrado que no vale para su cargo y del que se aprovecha para decir cosas que a otras personas sin puesto semejante no permitirían. Nadie, ningún medio de prensa, radio o televisión se haría eco ni difundiría barbaridades parecidas dichas por usted o por mí. (Eso es permitir).

En declaraciones sin admitir preguntas de periodistas, como una cobarde, un día afirma que el Estado persigue más al PP que a ETA, y se queda tan pancha. Y no se le cae la cara de vergüenza. Se entendería que eso lo dijera la vecina, un antisistema, alguien desesperado, pero no se puede consentir que diga esto una de las personas más poderosa de España y quedarnos en silencio, no puede decir esto quien sabe que este gobierno es el que mas detenciones de presos etarras ha efectuado. Es un insulto, una acusación muy grave, sin mostrar pruebas, sin argumentos, como si un cualquiera estuviera discutiendo en la barra de un bar. No puede acusar de esta manera al gobierno que menos ayudas y recortes de penas haya concedido a presos etarras. No puede decir esto una persona cuerda y responsable, y seguir en su cargo. A la calle por embustera y por desleal con el Estado.

Me parece grave lo dicho. Es grave porque sin demostrar nada siembra maledicencias y desconfianza entre la gente, en el Estado, en las Instituciones. Acusa a la policía, a los jueces, al Gobierno, a la Guardia Civil, a los servicios secretos, al ejercito, a los fiscales, a las compañías telefónicas… ella intuye que la acusación pueda llegar a muchos mas, porque llegará a todos aquellos que la gente pueda imaginar, porque al tirar la piedra y esconder la mano, al decir sin nombrar, sin dar pruebas concretas, reparte la porquería que cada uno quiera imaginarse. Por eso es grave. Porque crispa las relaciones sociales, porque cierra salidas de convivencia, porque no ofrece alternativas para ninguno de los problemas de los españoles. Y por supuesto porque no es ninguna salida a los problemas del PP. A la calle por incompetente y marrullera.

Acusa al Gobierno de crear un estado policial, como el franquismo. Ella debería conocer las diferencias existentes entre aquello y esto. Y si el número 2 de un partido que ha gobernado y volverá a gobernar España no las conoce, hay que despedirla. Por ignorante, por no tener la cualificación necesaria para desarrollar el puesto de trabajo que ocupa, que seguro pueden ocupar muchas otras personas más valiosas y leales con los españoles.

Comprendo que haya muchos votantes del PP diferentes, entre ellos habrá gente en contra de los corruptos y de todo aquel que cometa un delito sea quien sea, de éste o de otro partido, pero como en todas partes también habrá los que siempre están dispuestos a defender a los suyos, como ultras de un equipo de fútbol, aquellos que piensan que los mierdas y tramposos son los otros. Ahora, encima están jugando con ese tipo de gente, les dicen una cosa y la contraria a la vez y las dos no pueden ser verdad al mismo tiempo.

¿Que quiere decir Cospedal con eso del franquismo? Lo que dice es que aquello fue deleznable, que era un estado en el que los que mandaban y la poli, la guardia civil y el ejército hacían lo que les daba la gana, sin dar cuentas a nadie, salvo a los 4 o 5 que gobernaban. Lo que está diciendo es que nadie respetaba derechos individuales y colectivos. Lo que dice es que las leyes que existían, permitían al poder, hacer lo que quería, sin ningún control de nadie. Como poco, esto es lo que está diciendo, que era un país horrible.

El estado actual, no solo es democrático porque haya elecciones, que antes no había. También lo es porque existen muchos y diferentes poderes que se respetan y toleran en cualquier lugar del Estado. La permanencia de ellos posibilita que todo se sepa, no como antes, permite que todo acto político y de gobierno se controle y contrapese, no como antes. Precisamente al ser muy sencillo que todo salga a la luz y se discuta, en ocasiones pueda parecer que haya más problemas hoy que en el pasado. En la diversidad de poderes están involucrados muchos partidos, y muchas instituciones, y muchos grupos de poder y presión de todo tipo, incluidas instituciones internacionales, individuos, empresas, sindicatos, patronales, etc.

Cospedal es una de las personas más poderosas de España, su partido gobierna, en muchas Comunidades Autónomas, en muchos ayuntamientos, tienen bajo su mando a muchos funcionarios públicos diversos, a fuerzas policiales, etc., su partido controla parcelas de poder ejecutivo, de poder legislativo, de poder judicial, de poder policial, etc. Tienen poder en muy diferentes medios de prensa, de radio, televisiones, muchas licencias concedidas por ellos, (otras concedidas por otros), tienen poder en sindicatos, patronales, en la calle, en las iglesias…y esta persona me dice que desconfíe del Estado. ¿De quien, de ella?

¿Este de hoy es el estado policial del franquismo como dice Cospedal? Suspendida, que la echen a la calle. En aquellos tiempos nadie podía llevar la contraria al gobierno, nadie podía dar noticias en la prensa, existía el parte, las noticias eran dadas por el gobierno, se cerraban, se suspendían aquellos medios que dijeran algo que al gobierno no le venía bien, incluidos accidentes con decenas de muertes. Muchas personas fueron detenidas, golpeadas, y encarceladas solo por intentar decir algo. ¿Igual que ahora? Que la gente se harta de decir burradas por cualquier medio, sin probar nunca nada y no se mueve ni una hoja.

En el franquismo Cospedal no hubiera podido decir esa acusación tan grave. Ninguno de los periódicos, radios y teles que la difunden hubieran podido hacerlo en aquellos tiempos. Precisamente al difundir ahora su acusación demuestran que es falsa. A la calle por incapacidad intelectual. A la calle por enredadora.

Cabe otra interpretación. Si ella no fuera ignorante y supiera lo que pasaba en el franquismo, ¿por qué hablar así? Pensará crear gran desconfianza, y encizañar, y junto con la crisis económica tumbar al gobierno, aunque para ello hubiera de comportarse como si fueran un grupúsculo antisistema en vez de cómo uno de los grupos mas poderosos de España. Hay otra razón al mismo tiempo, para distraer la atención de tantos casos de corrupción del PP como están saliendo y que investigan tribunales y policías de diferentes sitios. Solo en el caso Gurtell son más de 100 imputados en diferentes CCAA de España, algunos ya encarcelados, además del espionaje en Madrid entre miembros del gobierno autonómico y ayuntamiento, ambos del PP.

Pensará que puede crear inseguridad y desconfianza en todos los estamentos de una sociedad y en todas las instituciones, y que luego de repente cuando ella y su gente gobiernen, los ciudadanos volverán a confiar en los mismos cuerpos que ella ha desacreditado. Así de repente, de un día para otro.

Claro que para resolver el problema de la desconfianza creada hacia los servidores del estado, no creo se le haya ocurrido resolverlo como hizo el franquismo. Matar y represaliar, apartar de carreras y puestos de trabajo a miles de funcionarios públicos estatales, policías, guardias civiles, militares, jueces, fiscales, cargos públicos, maestros, catedráticos... Ella probablemente no lo haya pensado, pero muchos de sus escuchantes sí, han recibido el odio que ha sembrado. ¿Alguien piensa que en los barrios la gente no habla de estas cosas?

¡Que torpe, pero que torpe! Hay que echarla, porque lo que hace conduce al desastre económico y social, a la anarquía. Igual ella piensa que el paro y las dificultades que creará solo afectarán a los votantes del PSOE. La confianza es algo que cuesta mucho tiempo y esfuerzo ganarse, pero que puede perderse rápidamente y se tarda muchísimo en recuperar. Lo que hace Cospedal es jugar con fuego, que puede llevar a una sociedad, similar en muchas cosas a la italiana, en la que nadie se fíe de ningún aparato estatal, por tanto la fiabilidad y seguridad la dan grupos mafiosos ajenos al sistema.

¿Que espera obtener a cambio de lo que está haciendo? ¿Que ventajas, o premios? Si una de las personas mas poderosas de España como es ella, se siente perseguida y no denuncia un delito en el juzgado, que nos queda a nosotros ciudadanos de a pie, como nos podemos sentir los demás. No puede ser tan tonta como para creer que se pueden decir las cosas que ha dicho y aquí no pasa nada. ¿Que propuestas sobre soluciones a la crisis ha dejado de decir en vez de esto?, ¿quiere tapar algo al decir estas cosas? ¿Que soluciones a problemas ciudadanos propone? O es que solo le interesan sus problemas y los de sus amiguetes.

P.D. Claro que pueden existir delitos de escuchas, y más. Denuncia a los juzgados y castigo a los culpables. Pero los culpables no somos todos los no militantes del PP.

1 comentario:

  1. No habrá quién eche de su pueso a la Cospedal y los que que la tuvieran que echar (os votantes del PP) yo creo que se recrean en esa frase de «¡Leña al mono, que es de goma!»
    Cuanto más ofenda al gobierno socialista, al PSOE, y ahora a las insttuciones del estado, más gustito les da a sus votantes.
    ¡Qué lástima!

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