en mi barrio alcorcón: abril 2020

miércoles, 15 de abril de 2020

martes, 7 de abril de 2020

Gracias Sistema de Salud. Gracias sanitarios

Supongo que no digo nada nuevo, muchísima gente piensa lo mismo y lo manifiesta por las tardes a las 8, hay que decirlo repetidamente, colectiva e individualmente. Se trata de reconocer la joya de la corona del estado de bienestar español, un sistema de salud creado con muchos esfuerzos por muchísimas personas en la España democrática, su existencia da valor a las muestras de solidaridad de otras personas y entidades, las donaciones de empresas que cuentan con estructuras societarias en otros países y enlaces de negocio habitual, encuentran así su sentido y utilidad. Son nuestros sanitarios quienes dan mayor valor a los gestos de esas empresas.

Sin ese sistema de salud, sin sus gentes, su organización, compromiso y calidad humana, las muchas muestras de solidaridad que aparecen por todos los rincones de este país no encontrarían tan fácilmente ubicación y utilidad. Un sistema de salud no se crea por las donaciones de los marqueses y ricos de turno, su creación, dotación y organización no puede depender de la caridad; ahora sí, ahora no, hoy le opero porque el marqués donó material… El sistema de salud que tenemos depende de la política, de las ideas y concepción del Estado que tengan los partidos, depende de las dotaciones del Estado que se obtienen de los impuestos decididos por las instituciones democráticas, éstas elegidas en las elecciones, cuyo resultado dependerá de las decisiones y empuje solidario de la ciudadanía.

El sistema sanitario sitúa en primera línea de batalla a sus gentes, médicas, enfermeras, celadores, limpiadoras… esas gentes arriesgan su salud y su vida por el resto de la ciudadanía, realizan su actividad aún sin la protección adecuada, son nuestros héroes y merecen nuestra más alta consideración, ahora y fundamentalmente recordándolo cuando todo esto pase.

Montones de guantes, trajes protectores, mascarillas, respiradores realizados en múltiples talleres reconvertidos o fábricas adaptadas, solo tienen su máximo sentido con un sistema de salud a pleno rendimiento, esa estructura organizativa y humana da valor a todas las muestras de solidaridad. Hospitales de campaña realizados en una o dos semanas con el apoyo de fuerzas armadas, y de múltiples técnicos de aire acondicionado, fontaneros, instaladores de pladur, etc. etc. esas instalaciones tienen su eficacia porque existe un sistema de salud en marcha que presta su organización, su personal, sus atenciones y conocimientos para rentabilizar esos esfuerzos.

Las experiencias de su capacidad, entrega y su trato amable son conocidas en las múltiples ocasiones que los hemos necesitado, no solo ahora, y ello a pesar de sus pésimas condiciones de trabajo y salariales, a pesar de sus contratos precarios, algunos de duración por tres meses, con la duda de su renovación, a pesar de sus traslados de allá para acá, siempre nos atienden amablemente parando nuestros nervios y muchas veces nuestras malas formas.